Con
Alejandro ganador y Marcos como escolta, los hermanos de Las Flores reafirmaron
su superioridad entre los cuatriciclos.
“Son la sensación del Dakar en la
Argentina. Descubrimos dos grandes deportistas, los mejores en cuatriciclos.
Hasta son “showman” también. Sin dudas, generan una expectativa en la Argentina
que jamás hubiéramos imaginado”,
comentó Etienne Lavigne, director general del Dakar, al referirse a la
actuación de los hermanos Patronelli, que dominaron la disciplina en las
últimos tres ediciones de la competencia.
En
la Plaza de Armas de la ciudad de Lima, Perú, donde la organización instaló su
último centro de operaciones de la competencia, los hermanos Patronelli celebraron
en el podio el segundo triunfo consecutivo de Alejandro (Marcos ganó en 2010),
y ambos descendieron la rampa recibiendo el cariño de los argentinos que
estaban allí, y también de peruanos que los ovacionaron.
“No lo puedo creer. Pienso en todo lo que
pasamos estos días: las dificultades, los problemas, el cuatriciclo con agua
hasta el tanque de combustible, las dunas, los ríos secos pedregosos. Siempre
uno cae de todo lo que hizo varios días después de finalizar las carreras”, reflexionó Alejandro.
- ¿Qué
fue lo más duro de esta competencia?
- Todo fue duro. Comenzamos con mucho
calor en Argentina, demasiado. Eso ya condicionó la carrera, porque nadie
esperaba semejantes temperaturas. Y luego vinieron las exigencias de Chile. Y
ni hablar de Perú.
- ¿Pensabas
que Perú iba a ser tan complejo?
- Se habla de su geografía, y realmente
lo fue. Por suerte, con Marcos llegamos con una ventaja que nos permitió hacer
el camino con mayor soltura, aunque eso no significa una ventaja. El Dakar
siempre te sorprende con algo inesperado, y hay que estar preparado.
- Con
Marcos ya ganaron los últimos tres Dakar. ¿Cuál es la fórmula?
- Mucho trabajo y fe en lo que se hace.
Por suerte, tenemos un equipo que nos brinda lo mejor y nosotros nos enfocamos
en cada detalle.
- ¿Los
alivió que los principales rivales europeos no fuesen clasificados por cuestiones
técnicas?
- No, para nada. Fue una pena, porque uno
quiere correr contra todos. Vinieron con un motor que no encuadraba con el
reglamento y quedaron marginados. Pero uno sale a correr su carrera. Con Marcos
nos proponemos metas y salimos a cumplirlas; somos metódicos para eso.
El
cariño del público para con ellos no cede; guardaron los trofeos en un bolsillo
del buzo, se pusieron el casco y partieron acelerando a fondo frente al palacio
gubernamental. Marcos hizo trompos frenteante al público y Alejandro puso su
cuatriciclo sobre las ruedas izquierdas. Y así se fueron: felices, con otro
Dakar en el bolsillo.
465
máquinas partieron de Mar del Plata el 1 de enero.
246
fueron las que llegaron a Lima, tras la última etapa.
Celosos de sus Quads
Las
máquinas no regresarán por encomienda.
“Pensamos mandar los cuatriciclos por
encomienda. Pero los queremos mucho, y preferimos llevarlos en nuestros propios
trailers. Mañana saldremos con la familia en las camionetas, rumbo a Las
Flores. Será como otro Dakar, aunque más distendido”, comentó Marcos Patronelli en Lima.
Fuente: La Nación (Roberto
Berasategui / Enviado especial)