Ford Motor Company celebra el centésimo aniversario de la línea de montaje, sistema de ensamblado introducido por Henry Ford que revolucionó la industria a nivel mundial.
Inaugurada el 7 de octubre de 1913 en la planta de Highland Park, Michigan, originó el proceso de producción seriada caracterizado por una notable reducción de tiempo y recursos empleados; nacido en la fábrica de Henry Ford, el sistema fue adoptado rápidamente por otras industrias en todo el mundo.
Cuando Ford comenzó a fabricar automóviles a comienzos del siglo XX, la tecnología de vanguardia consistía en un modelo productivo que resultaba ineficiente para la expansión del automóvil, objetivo que desvelaba a Henry Ford: carros tirados a caballo trasladaban las carrocerías, mientras equipos de producción las ensamblaban sobre caballetes y rotaban de una estación a otra. Aunque la entrega de piezas estaba cronometrada, las demoras eran habituales, y con ellas los aumentos de costos por unidad.
Expertos de diversas áreas, siguiendo la visión y liderazgo de Henry Ford, crearon las condiciones necesarias para llevar adelante las innovaciones requeridas en la planta de producción que condujeron finalmente a la instalación de la línea de montaje móvil.
Los ingenieros desarrollaron el sistema en un
espacio abierto de la planta, en el que ubicaron un torno y una cuerda tendida
sobre el suelo. Durante la jornada, 140 ensambladores dispuestos a lo largo de
150 metros instalaban las piezas en el chasis que se movilizaba por el suelo
usando el torno. Las horas/hombre necesarias para producir un vehículo se
redujeron en más de 12, requiriéndose entonces menos de 3 para finalizar cada
unidad.
La primera optimización del proceso productivo se realizó en enero de 1914, cuando la cuerda original fue sustituida por una cadena que aportaba mayor seguridad. Los resultados de la producción seriada fueron inmediatos y significativos: en 1912, Ford Motor Company produjo 82.388 unidades del Modelo T, cuyo precio de venta era U$S 600; en 1916, la producción se elevó a 585.388 vehículos, y su precio cayó a U$S 360.
Continuando la visión de su fundador, Ford Motor Company ha mantenido vigente el espíritu emprendedor que inspiró a Henry Ford a transformar la industria, para producir así vehículos accesibles que representan nuevos paradigmas en sus segmentos.
La primera optimización del proceso productivo se realizó en enero de 1914, cuando la cuerda original fue sustituida por una cadena que aportaba mayor seguridad. Los resultados de la producción seriada fueron inmediatos y significativos: en 1912, Ford Motor Company produjo 82.388 unidades del Modelo T, cuyo precio de venta era U$S 600; en 1916, la producción se elevó a 585.388 vehículos, y su precio cayó a U$S 360.
Continuando la visión de su fundador, Ford Motor Company ha mantenido vigente el espíritu emprendedor que inspiró a Henry Ford a transformar la industria, para producir así vehículos accesibles que representan nuevos paradigmas en sus segmentos.