La primera pick-up de una marca Premium se
fabricará en Barcelona, España y en Córdoba, Argentina. La Clase X combina características propias
de un vehículo de su segmento —aptitud todo-terreno, funcionalidad y robustez—
con atributos clásicos de un Mercedes-Benz: confort, dinamismo, diseño y
seguridad.
Mercedes-Benz prevé 2 propulsores para el ámbito local: un turbo diésel V6 3,0
litros de 258 CV y 550
Nm de torque máximo, con transmisión automática 7G-Tronic Plus de 7 velocidades
y tracción en las 4 ruedas 4Matic; y otro, biturbo diésel de 4
cilindros y 2,3 litros de 190 CV, con tracción trasera o total y
caja manual de 6 marchas o automática de 7; así, podrá cargar hasta 1.100 kg y
remolcar hasta 3.500 kg.
La Clase X ofrecerá 3 niveles de equipamiento: Pure, Progressive y
Power. Esta última representará el tope de gama, incluyendo
llantas de aleación de 18”; asientos tapizados en cuero —los delanteros con
regulación eléctrica y soporte lumbar—; sensores solares y de temperatura en el
climatizador automático; volante multifunción; ópticas LED; y más. La amplia
lista de opciones incluirá cobertor y cerramiento para la caja; estribos
laterales; asientos delanteros calefaccionados; barras de techo; llantas de aleación
de 19”; cámara de visión 360º y estacionamiento asistido.
El director de Relaciones Institucionales de
Mercedes-Benz Argentina, Gustavo Castagnino, expresó: “En la filial argentina estamos muy orgullosos de que la Casa Matriz
haya asignado a nuestro país la producción y exportación de la Clase X. Sabemos
que se trata de un mercado muy competitivo, pero estamos convencidos de que los
clientes elegirán la Clase X a la hora de comprar una Pick-Up.
Se trata de
la primera Pick-Up de una marca Premium, y está destinada tanto al trabajo
altamente exigente como al uso particular.
El inicio de
su comercialización en Argentina está previsto para comienzos de 2019.”