Dan Ammann,
presidente mundial de la firma automotriz, hizo el anuncio en la Casa de
Gobierno. La inversión se destinará a la producción de motores de última
generación en la Planta de GM en Rosario.
Los motores serán producidos en la que será la
primera planta de fabricación de impulsores de aluminio de última generación de
GM en Sudamérica.
Ammann destacó que la iniciativa se inscribe en el
marco del “Proyecto Fénix” a desarrollarse en Argentina, que prevé una
inversión total de 740 millones de dólares hasta 2016. La fábrica se construirá
a partir del último trimestre de este año en el complejo automotriz de GM en
Rosario, Santa Fe; el comienzo de la producción está previsto para principios
de 2017, tras lo cual se iniciarán las exportaciones.
La futura planta dispondrá de una capacidad productiva
de 140 mil motores anuales, y será la base para una plataforma global
industrial. Inicialmente, se fabricarán unos 90 mil motores por año, de los que
se exportarán 10 mil, principalmente a la Unión Europea, por un valor
aproximado de 23,5 millones de dólares.
Está previsto lograr un incremento progresivo de
integración nacional, partiendo de un piso de 32%, cifra que podría
incrementarse hasta el 50% mediante el desarrollo de proveedores industriales nacionales
de alta tecnología.